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Meditar es la mejor de las gimnasias


Las áreas relacionadas con las emociones son mayores y tienen más células grises en las personas que practican activamente la concentración.
Bailar ritmos caribeños hasta quedar extenuado, transpirar en los gimnasios o correr tras el personal trainer son algunas de las estrategias que empleamos para agrandar los músculos y darles tonicidad, con el fin de lucir un físico fuerte y armónico. Pero, ¿existe algún tipo de gimnasia con la cual podamos hacer crecer nuestro cerebro? Según parece indicar un estudio realizado en una universidad de Estados Unidos, la meditación puede ser un muy buen ejercicio para la mente.
Imágenes que hablan
Los científicos usaron datos ofrecidos por estudios de resonancias magnéticas de alta resolución y tridimensionales. Con ellas hicieron lecturas del sistema nervioso central de un grupo de personas mientras estas estaban meditando. De acuerdo con el estudio, ciertas regiones del cerebro de quienes hacía tiempo se dedicaban a meditar eran más grandes que las de quienes no lo hacían.
Para ser más precisos, las imágenes del cerebro de aquellos que meditaban mostraron volúmenes significativamente más grandes en el hipocampo y en áreas de la corteza órbitofrontal, el tálamo y la circunvolución temporal inferior. Todas regiones que, según se sabe, intervienen en la regulación de las emociones.
La investigación fue llevada a cabo en el Laboratorio de Neuroimágenes de la Universidad de California, en Los Angeles. Se trata de un centro de estudios líder en el desarrollo de algoritmos computacionales y enfoques científicos para la comprensión y el mapeo de las distintas estructuras cerebrales y sus funciones.
Eileen Luders, autora principal del trabajo, afirma que las personas que practican la meditación habitualmente tienen una particular habilidad para desarrollar emociones positivas, más estabilidad emocional y un comportamiento más consciente. La idea de Luders y de su equipo es que las diferencias que observaron en los estudios cerebrales podrían explicar esas habilidades excepcionales.
Menos estrés
Esta investigación no hace más que confirmar los aspectos beneficiosos de la meditación. Se sabía que, además de lograr una mejor concentración y de ejercer control sobre sus emociones, muchas personas que meditan sufren menores niveles de estrés y desarrollan sistemas inmunológicos más fuertes. No obstante, hasta el momento no se conocía mucho respecto de los vínculos entre la meditación y la estructura del cerebro.
Los investigadores emplearon dos metodologías distintas para medir las diferencias en las estructuras cerebrales. En un caso dividieron el cerebro en varias regiones de interés, lo que les permitió comparar el tamaño de ciertas estructuras. Por otro lado, segmentaron el cerebro en diferentes clases de tejidos, lo que les permitió comparar la cantidad de materia gris que había en regiones específicas.
Más volumen
Los resultados, publicados en la revista científica Neuroimage, indicaron que quienes meditaban tenían más células grises en ciertas regiones del cerebro que quienes no lo hacían.
Concretamente, se detectó un mayor volumen del lado derecho del hipocampo y más cantidad de materia gris en la corteza órbitofrontal, en el lado derecho del tálamo y en la zona izquierda inferior del lóbulo temporal. Aquí estarían -según los científicos- las bases neuronales que dan a quienes meditan la extraordinaria habilidad de regular sus emociones y de lograr respuestas adecuadas para enfrentar las vicisitudes de la vida.
El siguiente paso
Lo que aún no se conoce -y hacen faltan más estudios para poder dilucidarlo- es qué correlaciones específicas hay en el nivel microscópico. Es decir, determinar si en el cerebro de quienes meditan hay más cantidad de neuronas, si el tamaño de estas células es mayor o si desarrollan un patrón particular de conexiones.
Es importante destacar que no se hizo un seguimiento de los sujetos desde que estos comenzaron a meditar. De ahí que no se pueda descartar definitivamente la posibilidad de que hayan tenido -antes de iniciarse en la meditación regular- regiones de su cerebro con mayor tamaño y más materia gris, y que este hecho puntual las haya llevado a la meditación.
De todas formas, según los investigadores esto no es probable, por cuanto numerosos estudios previos han dejado en claro que el cerebro cuenta con una plasticidad muy destacable y que distintas influencias ambientales pueden enriquecerlo, produciendo cambios en su estructura.

Fuente:señales de los tiempos

Pérdida de peso en mujeres


En un estudio realizado por varias universidades del Reino Unido se dividió a un grupo de 62 mujeres de edades comprendidas entre los 19 y los 64 años  en dos grupos diferentes de forma aleatoria.
El primer grupo continuó con su dieta habitual, el segundo grupo acudió a un taller de mindfulness de cuatro sesiones de dos horas de duración cada una.
Se realizaron mediciones de línea base, a los cuatro y a los seis meses de la finalización del programa.
En este estudio se consideraron tres variables: el IMC (Índice de Masa Corporal), la actividad física y la salud
A los seis meses de la intervención las participantes mostraban aumentos significativos en su actividad física comparados con el grupo de control pero sin diferencias en peso o salud mental. Sin embargo cuando se descartó a 7 participantes que habían informado de no haber aplicado nunca los principios aprendidos durante la intervención entonces los resultados mostraban reducciones significativas en el IMC.
Se constató que está reducción del IMC estaba mediada por la reducción de la conducta compulsiva de comer (binge eating)


artículo completo (en inglés)

Valores


Basta una ojeada al panorama actual para identificar los valores que se promulgan. Valores en gran medida ocultos de forma explícita en los mensajes que recibimos pero muy patentes si tenemos en cuenta su impacto.
Me gustaría presentar algunos de ellos.

El primer valor es el que refiere al bienestar material. Todo lo demás parece girar entorno a esta máxima. Consecuentemente todo lo no relacionado con lo material es desdeñado: las emociones, la importancia de las relaciones humanas, el calor del hogar, el sabor de la amistad, la ternura e intimidad del amor o el apoyo y la compresión en el desaliento.

La belleza física es otro de los valores mas difundidos. Por un lado se promueven imágenes de ideales estéticos y paralelamente se fomenta el sedentarismo y una alimentación repleta de grasas, aditivos, conservantes e hidratos de carbono de baja calidad. Frustración asegurada.

El afán de protagonismo es otro de los valores. Estar en la cresta de la ola a cualquier coste es el objetivo. El para qué exactamente parecemos tenerlo menos claro.

La juventud se promociona como ideal a seguir. La verdad es que lo llevamos bastante bien hasta que empezamos a rondar cierta edad en la que el cuerpo aporta los primeros indicios de deterioro y atestigua nuestra experiencia vital. La sabiduría y la experiencia se desechan por la borda como si de un lastre se tratase. Entristece bastante pensarlo.

La competitividad es otro de los valores al uso. Tanto nuestro modelo económico actual como el  social están profundamente arraigados en ella. Ser el mejor, el que mas gana o el que siempre gana. Pero el premio muchas veces no importa con tal de ganar, es mas, el premio muchas veces no es premio si no castigo, es decir masoquismo en estado puro.

El consumo es otro de los valores de este particular ranking. Consumir no por necesidad si no por el mero hecho de hacerlo. Creo que sobran los comentarios al respecto.

Y finalmente llegamos a otro de los valores mas extendidos: la prisa. Está de moda ir a toda velocidad por la vida, estar ocupadísimo, aunque el objeto u objetos de nuestra prisa a veces no están tan claros. Incluso añadimos cada vez mas obligaciones y compromisos a nuestra apretada agenda llegando a una situación de prisa dentro de la prisa.
Muy curioso.

La verdad es que tenía preparado hablar de unas cuantas cosas mas en este post pero después de dibujar este panorama me he quedado atascado y no puedo dejar de preguntarme cómo hemos podido llegar a esta situación.

Prometo continuar sobre ello en un nuevo post.